Como cada verano (más si cabe en 2021) muchos de nosotros programamos nuestras vacaciones, es uno de los momentos en los que más dinero gastamos (si no el que más), pues aprovechamos ese periodo para realizar esos viajes que llevamos tanto tiempo esperando poder hacer y es por eso que es el momento en el cual se producen más fraudes online.
Con la irrupción en nuestras vidas del COVID-19 muchas de nuestras actividades cotidianas se ha digitalizado y, en el caso de la contratación de viajes (la cual ya estaba bastante actualizada en este sentido) lo que se ha visto es un importante incremento de la contratación a través de estas vías, entrando en este “mercado” nuevos clientes, esto también lo saben los ciberdelincuentes, quienes ven en la unión de presupuesto destinado a nuestras vacaciones y nuestra falta de conocimientos en las compras online una oportunidad “de oro”.
Por desgracia, lo que hemos comentado es ya una realidad, como expertos en reclamaciones aéreas no han sido pocos los asuntos por este tipo de “estafas” las que nos han comenzado a llegar, pasajeros que ven cómo, tras realizar el pago siguiendo las instrucciones ven como la reserva no se confirma, momento en que saltan todas las alarmas pero que, quizá, es demasiado tarde.
En las siguientes líneas vamos a intentar dar unas pequeñas pautas para detectar un fraude online con anterioridad, por adelantado decir que no somos expertos en esta materia, para poder dar estas notas hemos consultado a verdaderos profesionales y ayudar en la medida de lo posible a evitar este problema que con el tiempo irá aumentado.

Cómo detectar de un fraude online
Vamos a empezar por lo qué posiblemente sea lo más efectivo, detectar cuando estamos siendo víctima de una de estas estafas online, cada día este tipo de fraudes online son más sofisticados por lo que el riesgo cero no existe, vamos a centrarnos en cómo detectar páginas fraudulentas:
La Oficina de Seguridad del Internauta en su página web www.osi.es (web que recomendamos encarecidamente visitar) nos da una serie de recomendaciones clave:
– Revisar la barra de direcciones de nuestro navegador:
Revisar con detenimiento la barra de direcciones de nuestro navegador nos permitirá en primer lugar revisar si la web donde estamos es realmente la que dice ser, en ocasiones no tendrá nada que ver con la marca o su contenido, otras, buscarán directamente inducir a error en el usuario, por ejemplo www.bankia.es puede haber sido modificada por www.bankiia.es, parece sencillo darse cuenta de esto pero cuando estamos centrados en buscar una oferta para viajar podemos pasar por alto este tipo de cuestiones.
Asimismo, con un simple vistazo a nuestra barra de direcciones podremos verificar si la misma contiene certificado SSL (el candadito que nos aparece a la izquierda), este certificado garantiza que la conexión está totalmente encriptada, es decir, que los datos que introduzcamos (por ejemplo, nuestra tarjeta de crédito) únicamente será conocida por nosotros y la página web, la ausencia de estos certificados en páginas donde introduzcamos nuestros datos personales es un primer paso para dudar de la legitimidad de ellas.
– Contenido de la página
Otra recomendación que debemos seguir es observar el propio contenido que nos da la web, normalmente las imágenes de las páginas fraudulentas suelen tener peor calidad que las legítimas, esto es por qué las suelen descargar directamente, con el deterioro de calidad que eso supone.
Otro aspecto fundamental lo encontramos en los precios, aquí debemos intentar ser objetivos, precios excesivamente baratos o rebajas muy llamativas sin una justificación (por ejemplo, una promoción temporal o rebajas) suele ser un importante indicio.
– Pie de página
Finalmente, vamos a revisar si los enlaces con política de privacidad, aviso legal y política de cookies (normalmente estarán en el pie de página) son correctos, veremos que como norma en este tipo de páginas no encontraremos ningún tipo de información de la empresa (domicilio, CIF, contacto…) ni ningún tipo de sellos o certificaciones de confianza.
En cuanto a los enlaces, normalmente no funcionarán, estarán sin traducir o con un lenguaje poco cuidado y con muchos errores gramaticales, con un formato descuidado (indicio de que únicamente se ha dedicado tiempo y atención a la página de compra), pasa algo similar con la política de cookies y la política de privacidad, políticas que suelen ser directamente copiadas de otras webs.
– Métodos de pago
Imaginemos que hemos confiado en la página y hemos seleccionado un producto (por ejemplo, un viaje ida y vuelta a Santo Domingo por un precio extremadamente barato, llega el momento de pagar, normalmente encontraremos una gran cantidad de métodos de pago con sus respectivas garantías (que normalmente suele ser una imagen) pero a la hora de elegir sólo podemos pagar con tarjeta de crédito o mediante transferencia bancaria (el resto de las opciones han desaparecido).
Si por desgracia, introducimos los datos de nuestra tarjeta de crédito se los estaremos dando a los ciberdelincuentes, quienes podrán utilizarlos para sus actividades y, por supuesto, habremos pagado un dinero por un producto (en este caso nuestro viaje) que nunca disfrutaremos.
En los últimos meses hemos notado que se priorizan el método de pago mediante trasferencia bancaria, a priori puede parecernos más seguro puesto que no introduciremos los datos en ninguna página web, pero debemos tener en cuenta que, una vez el dinero sale de nuestra cuenta será muy difícil recuperarlo si hemos sido víctimas de un fraude.
¿Qué hacer si hemos sido víctimas de un fraude online?
Hemos visto algunas recomendaciones que nos pueden ayudar a evitar sufrir fraudes en internet, pero debemos ser conscientes que estos consejos no garantizan (ni mucho menos) que no podamos ser víctimas, cada día la ingeniería detrás de estas prácticas delictivas es mayor y, por lo tanto, es más fácil caer en ellas, si creemos que hemos sido víctima de un delito de este tipo lo primero que nos recomiendan es contactar con nuestra entidad bancaria, si podemos evitar que el dinero salga de nuestra cuenta o que vuelva a ella todo habrá quedado en un susto.
Dicho esto, en todo caso recomendamos:
- Denunciarlo inmediatamente ya sea ante la Policía o ante la Guardia Civil.
- Ponerse en contacto con el Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE).
- Ponerse en contacto con la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI)
Otros enlaces de interés de la OSI, Oficina de Seguridad del Internauta relativos al fraude online:
Trucos para reconocer una web segura de compra online
Cómo saber si una tienda web es de confianza
Si has sido víctima de un fraude online o simplemente quieres añadir algún consejo o recurso, déjanos tu comentario.
Excelentes consejos, muchas gracias